Quien hubiese pensado que en una pelea de boxeo entre mujeres se pudiera llegar a ver tal derroche de puños dados con tanta certeza como para lograr crear heridas de el tipo que se muestra a continuación.
Bueno, por lo menos la ganadora se ve algo feliz, si así terminó ella [miren nada más ese ojo] no quiero ni pensar como terminó la otra chica.
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